martes, febrero 21, 2006

Testimonio - Evelyn Riaño - Zona 1 Suba


Evelyn Riaño
Originally uploaded by JPCH.
Mi testimonio comienza a partir del mes de noviembre donde mis papás se separaron, debido a que mi papá tenía una enfermedad llamada esquizofrenia paranóica sicotica, la cual nos llevó a huir de él, por defensa personal, pues se había agudizado el problema. Durante el mes de noviembre y diciembre llegué a odiar a mi papá, y mi mamá igual le odiaba a él, pero en ese tiempo Dios hizo un trato completo con nosotras, dejando el odio atrás y encontrando el perdón en nuestras vidas, pasando a querer a mi papá. Mientras no estuvimos en nuestra casa, mi papá tomo la decisión de encontrarse con Dios, solo sé que duró 2 meses en puro ayuno y oración, y la verdad gracias a ese encuentro con Dios mi papá quedó completamente sano de su enfermedad. ¡Fue un milagro! Solo se que cuando volví a casa a visitar a mi papá, con mucho miedo de enfrentarlo, lo que encontré no lo pude creer; era un hombre totalmente nuevo, sano, joven. No lo creía.

Duramos dos fines de semana visitándonos y el odio y el rencor que había en nuestras vidas se convirtió en amor, solo pienso que Dios restauró nuestras vidas. Mis papás regresaron, se volvieron a casar en el mes de diciembre en el Redil, y allí comienza el gran desafío como familia nueva.

Más o menos el día 4 de enero mi papá estaba haciendo el devocional, cuando de pronto empezó a hablar en lenguas, y mi mamá escuchó la voz de mi Dios que decía: “Tus hijos serán mis siervos.” Mi mamá me contó y pues la verdad no le puse mucho cuidado, solo se que llegó el día 9 de enero donde me invitaron al Tabernáculo de Cali (de la Cruzada) donde había una reunión de jóvenes, y al llegar la líder Celeste (de Alfa y Omega) dijo: “Les tengo un desafío: El Plan MIL.” En ese momento mi vida se partió en dos; me puse a reflexionar y llegué a una conclusión: Mi vida no tiene sentido. Esto me llevó a pensar: “¿Lo tomo, o lo dejo?” Llegué a mi casa, le conté cómo era el Plan MIL a mi papá, y él dijo: “Si en tu corazón nace ir, hazlo.” La verdad tuve una semana para tomar la decisión, y pedí dirección a Dios, y la respuesta fue rápida y determinante; fui a la Biblia y Dios respondió a través de una promesa en Génesis 26:3-5, 12-13, 24. Reuní a mis papás y les dije: “¡Me voy!”

La verdad fue mucha la felicidad de todos, aunque la nostalgia nos embargaba. Inmediatamente en una semana conseguí el dinero que necesitaba, la ropa, el maletín, en fin, todo se dio. Cuando llegué a Bogotá a comenzar el Plan MIL, Dios tuvo un trato muy especial conmigo. Durante este tiempo de misión me ha hecho entender que en realidad valgo mucho, que soy valiosa para él, y que él me ama como nadie lo ha hecho. Estoy feliz porque la mano de Dios se ha movido con poder. Ahora puedo decir que mi vida tiene sentido, que vale la pena vivir y servir a Dios.

El venir al Plan MIL fue la mejor decisión que he podido tomar, y la verdad desde que llegué aquí, a mis papás les está yendo excelentemente, tanto que están dirigiendo una zona en Cali.

Ahora entiendo que ese desierto de problemas y llanto valió la pena, porque gracias a esto muchos llegaron a los pies de Cristo.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

mira este testimonio me ha motivado mucho, en mi corazon.
Creo que el SEñor es tan hermoso que utiliza todo medio para hablar al corazon.
Dios te Bendiga Ricamente.

Atte.
DAVID ANDRES HERNANDEZ MATTA
ARMENIA QUINDIO.
ndrx_hernandez@hotmail.com

Anónimo dijo...

Lindo testimonio Evelyn, ya sabia yo que Dios habrìa hecho grandes cosas contigo y estoy convencido de que las bendiciones para ti y tu familia no terminan aqui. El Señor harà grandes cosas contigo, con tu familia y con todos aquellos jovenes que han aceptado el reto del PLAN MIL. Los saludo a todos y que Papà Dios los siga llenando de bendiciones.

Att.
ANDRES MAURCIO ALZATE MONTOYA
Milàn, ITALIA