Bogotá 21 de Enero, 2006
Esta es una oportunidad espectacular para glorificar a Dios por su misericordia sobre mi y el gran amor que él me ha permitido recibir.
Pues al llegar a Bogotá estaba un poco insegura de mi llamado ya que mis padres me habían dicho que yo no estaba preparada para esto, que me iba a quedar grande y que definitivamente yo no iba a poder. Fue así como comencé a pedirle al Señor que me capacitara porque yo no quería quedarle mal a él sino que quería entregarle lo mejor de mí.
Al llegar a Bogotá me invadió una sensación de valentía, sentí como el Espíritu Santo me capacitaba para esta misión local, pues en tan poco tiempo Dios me ha hecho sentir que esto es lo mío, que él me formó en el vientre de mi madre para esto, para glorificarlo a él. Ahora cada día que va pasando me siento más comprometida y entregada solo por su amor a la obra. Yo le bendigo porque para mí es una bendición estar aquí, poder ser de su ejercito, entregándome a él y siendo parte del plan maravilloso que él tiene para Bogotá. Por su amor y misericordia sobre mí, gloria a Dios.
Dios les bendiga,
Gerlis Cáceres Moreno.
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